Soluciones para Almacenaje en Frío.

Las cámaras frigoríficas son entornos de temperatura controlada esenciales en la industria alimentaria, así como en la industria farmacéutica.

Uno o más cuartos conectados entre sí permiten obtener salas para la conservación, refrigeración o pre-refrigeración de productos, en las que se debe mantener una temperatura estable y preestablecida: este grado de temperatura depende de la función a la que esté definido el cuarto, que puede variar desde +18 ° C para la maduración de frutas como plátanos y aguacates, hasta -28 °C para la congelación de pescado o verduras, o en el caso de la industria farmacéutica, mantener muestras, tejidos y vacunas en temperaturas ideales para su estudio y su aplicación.

Un almacén frigorífico requiere de una especificación detallada según los materiales que se utilizara, con el fin de obtener el aislamiento necesario, reduciendo así costos de elaboración y mantenimiento. El análisis consiste en identificar el rendimiento necesario para mantener regularidad en las condiciones internas, particularmente de la temperatura.

Las salas blancas

En la industria alimenticia y farmacéutica son recurrentes las salas blancas, pero también podemos encontrar en la industria mecánica, electrónica, automotriz y aeroespacial, que requieren cada vez más algunas áreas de procesamiento estériles para garantizar la seguridad e higiene del producto terminado. Las salas blancas son áreas limpias, controladas y esterilizadas con atmósfera controlada. Significa que el aire dentro de ellos contiene una cantidad mínima de macropartículas de polvo en suspensión. Su construcción, uso correcto y mantenimiento están constantemente regulados por normas nacionales e internacionales.

Cámaras frigoríficas de temperatura positiva

Son cámaras que se caracterizan por una temperatura entre 0° C y 18° C y se utilizan principalmente para la conservación de frutas y verduras, en el caso del sector médico y farmacéutico, se utilizan para la conservación de algunos tejidos de muestra y medicamentos.

Proporcionan un ambiente apropiado para almacenar alimentos "frescos" en cantidades industriales, garantizando temperaturas constantes y valores bajos de humedad, a través de revestimientos aislantes de baja transmitancia térmica.

Cámaras frías a temperatura negativa

Caracterizadas por un rango de temperatura entre 0° C y -28° C, las cámaras frigoríficas a temperatura negativa se utilizan para el pre enfriamiento de frutas y verduras, refrigeración, congelación y ultra congelación. Por otra parte, en la industria farmacéutica se utilizan para la conservación de vacunas que requieren ambientes de ultra congelación. Proporcionan un ambiente adecuado para el almacenamiento y congelación de alimentos con un estricto control de las temperaturas, logrando que la humedad y la atmósfera interna mediante carcasas aislantes tenga muy baja transmitancia y dispersión térmica.

Los materiales adecuados para cámaras frigoríficas

Para espacios con temperatura controlada como cámaras frigoríficas o salas blancas, por ejemplo, se encuentran diferentes tipos de paneles aislantes que ayudan a asegurar las temperaturas necesarias para el almacenamiento de alimentos y medicamentos. Los paneles aislantes para ambientes de temperatura controlada pueden estar hechos de varios materiales, revestidos en acero antibacterial, láminas metálicas prepintadas o inoxidables, según el rendimiento de resistencia y reacción al fuego y/o durabilidad.

Para ambientes de temperatura controlada, se utilizan principalmente paneles aislados en poliuretano o poliisocianurato como isoparete e isobox , diseñados por IsoCindu, específicamente para la industria alimentaria y médica, combinando propiedades aislantes, ya sea con fijación oculta o a la vista y machihembrado ideal para evitar los puentes térmicos y mejorar el aislamiento.

IsoCindu cuenta con dos tipos de perfilado que se desarrollan en la línea de producción, adicional al acabado liso y gofrado también aplicando en línea de producción, que brinda mayor resistencia estructural, oculta detalles como golpes y abolladuras provocadas por el uso y mitiga ondulaciones en el panel.

Adicional a las características anteriores podemos contar con el sello de butilo aplicado en planta, que es un componente que beneficia al rendimiento del panel, permite un sellado homogéneo y confiable que minimiza los puentes térmicos, reduce riesgo de fugas y filtraciones y facilita la instalación.

Para maximizar el rendimiento térmico y garantizar hasta un 20% menos de pérdida de calor, IsoCindu cuenta con formulaciones de nueva generación con la tecnología LEAF, cuenta con una excelente reacción al fuego sin componentes halogenados, nocivos para el medio ambiente.

Los paneles asilantes IsoCindu representan una de las soluciones más útiles en el campo de elaboración y mantenimiento de la cadena de frío.

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